La mesa de concertación contra el cáncer de cuello uterino se comenzó a gestar desde el 2016 y hoy es una realidad.
Precisamente, por la falta de información y educación suficiente, sistemática y asequible, se han tejido mitos y tabús alrededor de esta enfermedad. Las mujeres temen hablar del Virus del Papiloma Humano (VPH) porque está asociado a su vida sexual. Lo que no saben es que el 90% de las personas (hombres y mujeres), que inician su vida sexual, tienen la posibilidad de contraer el Virus del Papiloma Humano en algún momento de su vida. La mayoría de las personas pueden eliminar el virus naturalmente, pero, en otras, persiste y es ahí cuando se desarrolla lentamente el cáncer de cuello uterino por la infección persistente del virus. El cáncer de cuello uterino y su relación con la infección del virus es un tema de salud pública que debe ponerse sobre la mesa de forma abierta, como un proceso infeccioso prevenible a través una vacuna o, en los cambios iniciales que se producen por la persistencia de virus en el cuello del útero, diagnosticarlos tempranamente con las pruebas ADN VPH, la citología y la colposcopia e, incluso, curar el cáncer en sus estadios iniciales con intervenciones quirúrgicas menores.
Otro de los problemas que tratará la Mesa son las barreras de acceso que existen, las cuales explican, en parte, que el 85% de las muertes por cáncer de cuello uterino se dan en países de bajo y mediano ingreso. Para derribarlas, la Mesa de Concertación
Para la Erradicación del Cáncer de Cuello Uterino, hace un llamado a recuperar los índices de vacunación contra el VPH y empezar a utilizar la prueba del ADN para la detección de la infección como las dos herramientas fundamentales para cambiar la historia del cáncer de cuello uterino en nuestro país y alcanzar los estándares positivos de regiones desarrolladas.
Los países que han logrado disminuir, de manera significativa, las muertes por cáncer de cuello uterino tienen programas organizados de tamizaje que incluyen actividades de diagnóstico temprano de la enfermedad y educación. Colombia, con la implementación del MIAS (Modelo de atención integral) y las rutas integrales de atención en salud (RIAS,) tiene una oportunidad única de ganarle la batalla al cáncer de cuello uterino.
La mesa de concertación tiene un origen plural de fundadores, que participan con un fundamento científico y social: La Liga Colombiana Contra el Cáncer, Profamilia la Sociedad Colombiana de Pediatría, Federación Colombiana de Sociedades de Ginecología y Obstetricia (FECOLSOG), Asociación Bogotana de Obstetricia y Ginecología (ASBOG), Asociación Colombiana de Colposcopia y Patología del Tracto genital inferior, Fundación Universitaria Sanitas, Universidad del Rosario, Universidad de los Andes y MSD, quienes se unen este 29 de marzo para presentar la Mesa de Concertación para la erradicación del Cáncer de Cuello Uterino.